La autoestima es la forma en la que te valoras a ti mismo, o lo que es lo mismo, cómo nos vemos físicamente, que aptitudes, actitudes o pensamientos nos atribuimos.
La autoestima se va formando con la edad y depende mucho de factores externos, de cómo nos han hecho sentir los demás durante toda la vida.
¿Cómo se crea la autoestima?
La autoestima se va formando en el transcurso de nuestra vida. También puede variar en cada momento, aunque a medida que tenemos más edad es más difícil que se modifique de forma importante.
La infancia y la adolescencia son las etapas más importantes del proceso de formación de la autoestima. Durante la infancia comenzamos a interactuar con el mundo y a conocernos, mientras que durante la adolescencia se inicia la independencia personal y comenzamos a confiar en nuestros propios recursos.
La baja autoestima se relaciona con una visión distorsionada de sí mismo y también de cómo creemos que nos valoran las personas a nuestro alrededor.
Usa el test para evaluar la autoestima disponible en nuestra web para determinar que opinión tienes sobre ti mismo.
Llegando a creer que todo lo que hacemos está mal, que nuestra familia o amigos tienen criterios negativos sobre nuestra persona, que la suerte nunca nos sonrie, que no eres atractivo físicamente o que eres incapaz de conseguir algún objetivo determinado.
Consejos para elevar la autoestima
1. Convierte tus autocríticas en pensamientos positivos
Evita pensar mal de ti mismo. Evita criticarte a ti mismo.
La próxima vez que notes que te criticas, para, respira, piensa en algo bueno sobre ti mismo.
Por ejemplo: si piensas, que torpe soy, no soy capaz de hacer nada bien, corta de raíz ese pensamiento. Piensa algo bueno sobre ti mismo como, al menos soy bueno con los ordenadores, o se me da bien la cocina, o sé hacer buenos chistes, o siempre estoy contento.
Es importante que dejes de enfatizar en lo que eres malo y pongas tu atención en lo que eres bueno. Este es el primer paso para mejorar tu autoestima.
2. Fíjate metas y ve venciéndolas
Comienza con una meta pequeña, a corto plazo, una semana por ejemplo.
Plantéate una sola cosa a cumplir en esa semana, como no aumentar de peso, fumar un número exacto de cigarrillos menos, salir a caminar todos los días, estudiar un determinado tema.
Algo que no sea difícil de conseguir pero a lo que tengas que dedicarle algo de esfuerzo.
Lo más importante de todo: escribe tu meta y colócala en un sitio visible. En el espejo del baño, o en el borde del monitor del ordenador.
Lo siguiente: cúmplela... Si no puedes esta semana, pues te obligas a cumplirla la próxima, y si no, la otra, pero tienes que cumplirla, por eso empieza con un objetivo fácil.
Una vez cumplida esa meta, trázate otra, una más difícil y a más largo plazo.
Siguiendo con los ejemplos anteriores trata en un mes perder 3 kg de peso, reducir a la mitad los cigarrillos, caminar 1 hora todos los días, estudiar un curso corto.
Usa tu imaginación y ve ampliando tus metas cada vez que cumplas una. Verás cómo mejora tu autoestima a medida que notas que eres capaz de cumplir con lo que te propones.
3. No te compares
Nadie es perfecto. Como cualquier otra persona tienes defectos, pero también virtudes. Siempre habrá alguien mejor o peor que tú en cualquier aspecto de la vida.
No te compares. Las comparaciones traen consigo la infelicidad y un deterioro de la autoestima, así que evita compararte con los demás.
Ese amigo de buen físico, con dinero y triunfador, es seguro peor que tú en muchas cosas, y tiene problemas igual que tú, lo que no suele ir contándolos por ahí.
A veces, solo es cuestión de cómo te ven los demás y de que nivel de autoestima tienes para parecer un triunfador o un perdedor. Pero cuando pongas en práctica estos consejos verás como tu autoestima irá subiendo.
4. Realiza ejercicio físico
Si ya lo haces pasa al siguiente punto, pero si no: tienes que hacer ejercicio físico. Es una de las formas más rápida de aumentar la autoestima.
Mejorando tu físico tu autoestima crece cada vez que te miras en el espejo. Ya sea por perder peso o por mejorar tu aspecto.
Sal a caminar ya, o apúntate a un gimnasio. Verás como te vas a sentir mejor contigo mismo y verás como las otras personas empezarán a darse cuenta de tu mejoría física. Así que no esperes, este es quizás uno de los trucos más rápidos para mejorar tu autoestima.
5. Intenta ser mejor cada día
Elige un aspecto de ti que no te gusta y trata de mejorarlo.
Algunos se tarda tiempo, pero si te esfuerzas verás como cada día ese aspecto negativo irá desapareciendo poco a poco.
Identifiquemos qué es lo que te gustaría cambiar y con qué objetivo, y esfuérzate en llevar a cabo ese cambio.
6. Huye de la perfección
Nada es perfecto. Es mejor hacer algo con defectos que no hacerlo esperando el momento perfecto.
¿Cuántas veces has dejado escapar una oportunidad porque no era el mejor momento?, porque no estabas 100% preparado, o porque ibas a hacer el ridículo.
La próxima vez no esperes la confluencia de todos los astros, simplemente hazlo.
Recuerda, la perfección no existe. Huye de ella.
Otros consejos rápidos para mejorar tu autoestima
Sonríe
Intenta sonreír más a menudo, sin causa aparente. Cuando vas a hablar con una dependiente, cuando hablas por teléfono con alguien, cuando saludas a tus compañeros de trabajo. La sonrisa abre puertas, facilita cosas y suele ser respondida con otra sonrisa. Todo esto sube tu autoestima.
Aléjate de las personas negativas
Todos conocemos a un amigo, familiar o compañero de estudio/trabajo que te hace sentir como basura, o que te hunde moralmente; lo que llamamos una persona tóxica.
El consejo es simple: Pasa la menor cantidad de tiempo con esa persona, reduce tu exposición a su radiactividad emocional.
Cultivar tus fortalezas
Todos tenemos fortalezas y debilidades, si te dedicas a mejorar los aspectos de tu vida en los que eres bueno tendrás más posibilidades de tener éxito, es por ello que cultivar tus fortalezas aparte de mejorar tu día a día también mejorará tu autoestima.
Sé tú mismo
No intentes ser quien no eres. Simplemente, sé tú mismo. Acéptate tal como eres, con tus virtudes y tus defectos.
Hazte un cumplido todos los días
Cada mañana, cuando te mires en el espejo, hazte un cumplido, lo que sea. Intenta no repetirlo cada día, así te obligarás a descubrir cosas buenas tuyas.
Haz un resumen de las cosas buenas antes de dormir
Al acostarte, has un breve resumen de las cosas buenas o de los objetivos que hayas hecho ese día e ignora las cosas malas o las meteduras de pata. Enfócate sólo en lo bueno y repásalo antes de dormir.